Si queridos amigos, hemos puesto en marcha el Club de Slot. Era el  último apartado que nos faltaba para cumplir nuestro sueño, 600 m2  dedicados a nuestro hobby.  El Club, la guinda del pastel, y el final de las reformas. -Bien! 

Ante nosotros se presentaba un nuevo reto.  Implicarnos de lleno en otra de las vertiente del mundo del Slot. Tener en la tienda una pista donde nuestros visitantes y amigos pudieran dar rienda suelta a  la diversión, donde  poder programar eventos relacionados, o aprender los trucos más sofisticados de manos de nuestros expertos, todo ello, era algo nuevo para nosotros.

La duda. ¿Como pondríamos a prueba las instalaciones para saber sus defectos y sus virtudes? La respuesta fue fácil. Se nos ocurrió convocar a unos cuantos de nuestros legendarios amigos, los cuales  respondieron a la llamada sin titubear, lanzándose de lleno al reto propuesto, «rodar y poner en cuestión todo los elementos del Club».

La convocatoria era para  el 3 de Enero. Así que todos fueron apareciendo, uno tras uno, con sus maletines de Slotistas  y muchas ganas de pasarlo bien.

Entre saludos  y  nostalgias les presentamos el Club y sus diferentes zonas: la pista, de 40m de desarrollo con cuatro carriles; la zona de boxes individuales; la zona relax con mesas y sillas para hacer meriendas (en nuestro caso una mini cena) preparada en un office completamente equipado; y  por último, la zona TV Smart con sofás, donde terminamos la velada revisando una de las míticas películas protagonizada por Steve McQueen, “24horas de Lemans”. Una gozada nostálgica total.

-Ah!  Como no podría ser de otra manera, hubo carrera. -Por supuesto!  No podía faltar,  era el motivo principal del encuentro, y está nos transporto a los años ochenta, con nuestros R-5 copa fabricados por Exin, el coche elegido para la ocasión.  Con ellos  intentamos superar tiempos récord. Cabe decir, que los exprimimos a fondo dando todo lo que estos mini bólidos podían dar de sí.

Al final, brindis de vencedores. Porque esa noche todos nos sentimos ganadores. Aunque siempre haya tiempos  y  tiempos en las clasificaciones,  la camaradería, las risas y el buen rollo,  sin duda, son el mejor de los premios.

Nosotros, el equipo Aloyshop tuvimos premio doble,  por un lado, pasamos la prueba del Club con nota,  y  por el otro, disfrutamos de la entrañable compañía de unos amigos “legendarios”. Gracias.